Lakers logró una victoria crucial y la base de ello estuvo en la defensa. El coach Nicolás Cárdenas analiza como lograron los angelinos detener a Butler, suprimir la zona y las mejoras del equipo luego del juego 3.
Autor:Nicolás Cárdenas (especial para www.pickandroll.com.ar)
En la previa al inicio a las finales, Frank Vogel, Jason Kidd y todo el cuerpo técnico de los Lakers sabían que se enfrentarían a un equipo que venía con la confianza en alza, gracias al excelente resultado que le daba su defensa zonal 2 - 3 (ver análisis anterior), favoreciendo el ataque rápido a cancha abierta encontrando en Herro, Robinson y, porque no, Crowder, sus armas exteriores más efectivas.
Además, los Heat demostraron en las series anteriores aun gran dominio del juego colectivo, con el tándem Adebayo - Dragic, manejando el ritmo del juego, apoyados por la experiencia y el aporte de siempre de Butler. A priori, veríamos una final donde desde el juego 1 prime la paridad, pero las lesiones le pasaron una mala pasada al equipo de Spoelstra, inclinando la cancha a favor de los angelinos.
Para los de la Florida, las pérdidas de Adebayo y Dragic fueron bajas muy sensibles, que se sintieron en el juego 2, donde la defensa zonal perdió en "Bam Bam" la voz de mando desde el fondo del campo, no pudiendo lograr los ajustes que acostumbramos a ver y, en Dragic, el organizador de juego que este equipo necesita para las ofensivas en transición o estacionadas, recayendo esta responsabilidad en jugadores como Herro o Robinson, quitándole a estos la posibilidad de generarse sus lanzamientos desde el juego sin balón o saliendo de las cortinas indirectas.
Por su parte, los Lakers supieron capitalizar estas ventajas dentro del rectángulo de juego, defendiendo de manera agresiva a los improvisados playmakers de los Heat, y moviendo la pelota de adentro hacia afuera contra la zona, con un Rajon Rondo en gran nivel, aportando puntos, leyendo y atacando los espacios débiles que presentaba la formación 2 - 3 de Miami.
En el juego 3, nuevamente con las bajas del interno y del esloveno, fue Butler quien tomó las riendas de su equipo en el manejo de las ofensivas, teniendo un partido digno de súper estrella, bien acompañado por Olynyk y el aporte de Herro, Robinson y Crowder.
Además hubo un excelente plan defensivo sobre Anthony Davis, quién no pudo hacer pie en el juego, y una intensidad constante, sabiendo que se jugaban gran parte de la serie, disputando con agresividad todos los balones. Se notó un Frank Vogel aturdido por el planteo de los Heat, teniendo a mi criterio, gran responsabilidad de no encontrar la vuelta para, a priori, discutirle más el juego a la franquicia de Riley.
"De los errores se aprende" dice el dicho y creo que así sucedió con Vogel y sus dirigidos en el cuarto juego de las finales. En ofensiva se vio un juego poco trabajado desde lo colectivo, sino más bien"de ganar como sea" (tal como lo admitió luego del juego LJ, quién le envió un mensaje a sus compañeros con esa arenga),
Situaciones donde primaba el juego individual de James, que estuvo impreciso con muchas pérdidas en el inicio del partido, pero con el correr del mismo fue afirmándose generando puntos y ayudas defensivas con sus penetraciones que liberaban a Caldwell-Pope (de gran aporte en la noche de ayer), y con apariciones esporádicas, pero muy efectivas, de Anthony Davis, sobre todo con dos triples claves en el último cuarto.
La clave del triunfo de los Lakers estuvo en su defensa.
Las rotaciones tras las ayudas defensivas fueron muy precisas, bien trabajadas, llegando constantemente a puntear el lanzamiento de los tiradores incomodándolos, lo que se ve reflejado en el bajo porcentaje de 3P que tuvieron los Heat.
Otro de los aciertos de Vogel, estuvo en emparejar a AD con Butler, siendo este un jugador sin gran lanzamiento exterior, por lo que Davis le daba espacio invitándolo a tomar el tiro, y lo esperaba unos metros más atrás para jugarle el 1 vs 1 defensivo con la diferencia lógica de talla, bajando notablemente los puntos en Butler.
Este conjunto de decisiones tácticas, nos lleva a plantarnos que principalmente, la defensa del campeón del Este, se baso en controlar a Jimmy Butler, considerando que si hay un jugador que tiene que hacer la mayor cantidad de tantos del rival sea él, negando con las rotaciones que el resto del equipo de la Florida, tome confianza y protagonismo en el score.
Veremos que pasa el próximo viernes en el quinto juego de la serie, si los Heat mejoran sus porcentajes desde la línea de 3P, si deciden arriesgar a Dragic, si los Lakers vuelven a repetir con éxito e intensidad su planteo defensivo y, si liderados por James o Davis, cierran la serie y se llevan el anillo de la burbuja.