Las semifinales de la Liga en Uruguay no llegaron a finalizar. Casos recurrentes de covid-19 en los equipos, sumado a desprolijidades y fuertes declaraciones que le dieron un tinte negro a la resolución del torneo.
Autor:José Fiebig (@Josefiebig en twitter)
Uruguay vuelve a vivir ciertos problemas con el covid-19 y eso repercutió directamente en el deporte del país vecino. Según confirmaron las autoridades de la Federación Uruguaya de Basketball (FUBB) que estaban en el Antel Arena, hubo un llamado del Secretario Nacional del Deporte, Sebastián Bauzá, para que no se jugaran los encuentros previstos a pedido del Gobierno Nacional.
Las series entre Aguada y El Nacional por un lado y Trouville ante Urunday Universitario no llegaron a finalizar. Directamente el torneo quedó suspendido pero tuvo varias vueltas y con fuertes declaraciones. El bombazo sucedió por el lado de Nacional, quien Nacional contaba con 15 casos positivos de COVID-19 entre el plantel, el cuerpo técnico y el staff y por eso tiene dos caminos: presentar un equipo con juveniles o no presentarse lo que significaría la victoria por 20-0 para Aguada.
Con Urunday pasó algo similar. Desde la Federación Uruguaya de Básquetbol (FUBB) confirmaron que le llegó el anuncio de Urunday Universitario de que no se presentará a jugar el tercer punto de las semifinales de la Liga Uruguaya frente a Trouville, luego que dos jugadores estuvieran en contacto con un positivo de COVID-19. Trouvielle tenía un caso positivo, el cual fue aislado pensando en lo que sería el tercer juego tras el 1-1 de los primeros cotejos y el pase a la final.
Las quejas por el lado comenzaron a llover. Las ideas y venidas de Nacional para jugar o no presentarse y al final de cuentas sí jugar el partido aunque sea con sus juveniles. Nacional se presentó con un equipo formado por diez jugadores: algunos Sub 23 y otros cadetes, y el extranjero Dominique Morrison. Serán dirigidos por un técnico de las divisiones juveniles dado que el entrenador del primer equipo, Leonardo Zylbersztein es un de los positivos de coronavirus al igual que sus colaboradores.
A Nacional se le reprogramaron los compromisos luego de los 15 casos confirmados para el segundo partido. Recordar que Nacional ganó el primer partido de la semifinales. No tendría tiempo de recuperar jugadores y llegó la bronca del otro lado. Los basquetbolistas juveniles hicieron el calentamiento con una remera que decía "deportividad en la cancha".
Pero minutos antes de tener que comenzar el partido, e incluso previo a la notificación de la FUBB respecto a la suspensión del básquetbol, el dirigente Alejandro Balbi reunió a los jóvenes y les manifestó que no se iban a presentar debido a que en Aguada saltaron dos casos de contagios del nuevo coronavirus y no querían exponerlos. Sobre llovido, mojado.
El experimentado Leandro García Morales expresó todo su enojo respecto de lo ocurrido. En declaraciones al diario Ovación de Uruguay comentó que "Nacional tenía un jugador con síntomas de COVID desde el día miércoles y no avisó a nadie. No solo eso, sino que el jueves fueron a entrenar al AA (Antel Arena), de nuevo sin avisar a nadie que tenían un jugador enfermo/por hisoparse!", inicia su comunicado. Y sigue: "Además, el viernes vuelven a entrenar al AA, otra vez sin avisar a nadie que habían hisopado al jugador que presentaba síntomas y que esperaban su resultado!".
"Nacional pasó por arriba de la FUBB, infectó al resto de los jugadores, a nosotros, y la liga se termina. Se victimizan. Una barbaridad que no corresponde en el básquet y la traen del fútbol".
Y finalmente expresa: "Especular de esta forma con la salud de los demás es una barbaridad! Dirigentes, médicos, cuerpo técnico y jugadores de Nacional deberían pedir disculpas por ponernos a todos en riesgo. No estar al tanto de los protocolos y reglamentos no es excusa para nadie!".
En conclusión, todo deporte en gimnasios fue suspendido momentáneamente en Uruguay. Muchas quejas, poca claridad y el básquet nuevamente afectado.