Se permite soñar

Otro día importante en la vida del básquet argentino. Nuevamente en cuartos de final, nuevamente cerca de las medallas, un lugar donde queríamos estar y finalmente el equipo lo consiguió. Es cierto, el objetivo de mínima pero finalmente concretado. Argentina no la pasó bien en el Grupo C, necesitó del juego final para clasificar ante Japón y finalmente encontrarse en cuartos de final.

Argentina chocará ante Australia desde las 9:00 con la televisación de Tyc Sports, TV Pública, Marca Claro y DeporTV. Un juego a todo o nada buscando meterse en un terreno de lujo como son las semifinales con opción directa de medallas olímpicas. Nadie le quita la ilusión a un equipo albiceleste ascendiente en nivel y confianza, pero aún con diversos altibajos y cuestiones a moldear ante un rival con un presente de lujo como Australia.

El conjunto de Sergio Hernández fue de menor a mayor en soluciones, ideas y defensa. Un arranque sumamente turbulento ante Eslovenia, no solo por la caída sino la forma, lo poco que dio en defensa y el dominio que tuvo su rival en prácticamente todo el encuentro. Mejoró ante España, contó con un fantástico primer cuarto mostrando un nivel cuasi similar al del Mundial 2019. Luego se pinchó en ambos costados, no mantuvo su ritmo y ofensivamente volvió a padecer. Supo calibrar la mira ante un vulnerable Japón, dominó la pintura, se mostró más conectado y no paso zozobras más allá de algún tramo bajo en defensa.

Como equipo, Argentina necesitará levantar aún más su nivel. Campazzo es el guía total del equipo con un ritmo muy alto y queda muy expuesto cuando no está en cancha. Hernández acostumbró a todos con la doble conducción, Laprovittola siendo un dos mucho más útil que como uno. Vildoza mejor acompañado que en soledad desde la base y tratando de afinar la mira. Brussino como todo terreno y valioso en su juego más Deck, quien mostró otra cara en intensidad, gol y velocidad.

El recambio será importante. Dosificar ciertos minutos y darle protagonismo a otros jugadores para no caer en la dependencia de los pilares. ¿Qué decir de Luis Scola? Sumando historia para su palmarés, goleador del equipo y muy activo ofensivamente. Habrá que leer que hará Australia sobre él y como utilizarlo en ofensiva sin recaer en exceso la bola o desde donde partirá su ofensiva considerando el tiro externo y el juego de pop que tuvo ante Japón donde rindió más y mejor antes de desgastarlo cerca del canasto.

Argentina y Australia ya se cruzaron semanas atrás. En Las Vegas, los oceánicos ganaron 87 - 84 con un bombazo de Mills en el cierre de juego. Argentina tuvo a Scola como goleador con 25 pts seguido de Campazzo con 12 pts y la ventaja de 39 - 34 al cierre de la primera mitad. De hecho, estuvieron a punto de jugar la final en 2019 aunque Australia perdió en la última bola frente a España.

¿CÓMO LLEGA AUSTRALIA?

Los oceánicos fueron uno de los mejores elencos en el inicio del torneo. Ganaron sus tres partidos, mostraron una gran calidad ofensiva con Mills como figura (21.7 ppp, 3.7 rpp, 5.7 app) sumado a la dinámica que impusieron. Por momentos jugando junto a Dellavedova y acompañado por Exum para la generación. Ingles (10.4 ppp, 41% t3) como uno de los puntos centrales en el perímetro.

Un elenco fuerte físicamente donde Landale (2,11) y Kay (2,06) fueron ejes para dominar cerca del canasto más su versatilidad saliendo de la llave. Aún así tuvo inconvenientes para dominar a cad uno de sus rivales. A Nigeria lo venció 84 - 67 pero necesitando de un gran cierre de juego. Con Italia hubo una enorme paridad que cortó en el final para ganar apretadamente 86 - 83. Por último debió trabajar su encuentro ante Alemania para el éxito final 89 - 76.

Recordamos que Australia no tendrá más a Aaron Baynes. El interno NBA sufrió una lesión en el cuello en el segundo encuentro y no volverá a ver acción en Tokio. Una baja muy importante cerca del canasto por gol, referencia y experiencia.

José Fiebig

@Josefiebig