Pergamino y Zárate festejaron en sus dos partidazos para sumar por primera vez victorias. El elenco de Pagura derrotó a Racing con un gran cuarto final. Los zarateños sorprendieron al granate en su casa.
Autor:José Fiebig (@Josefiebig en twitter)
ÉXITO DE PERGAMINO
En un partidazo, Pergamino Básquet ganó como local ante Racing para quitarle el invicto del torneo. Se llevó la victoria 70 - 62 amparado en un fantástico cierre donde logró hacer la diferencia. Mariani (17 pts, 4 rebotes, 6 asistencias) fue una de las figuras del partido.
El primer cuarto tuvo pasajes para ambos. Pergamino lució bien en defensa, tuvo movilidad e incomodó a Racing para colocarse al frente 11-7. La visita comenzó a mover la banca, encontrar mayores respuestas con Morera y Acuña para desequilibrar y generar un parcial de 9-4 para finalmente terminar arriba 16 - 15.
Racing aprovechó el bache ofensivo de su rival. Mantuvo su calidad defensiva sobre el perímetro local, sacó la diferencias, llegó a escaparse 26 - 16 dentro de un panorama chato. Pergamino estuvo seis minutos para anotar su primer gol de campo y tratar de emparejar las acciones. Gamazo y Baez a buen ritmo, Racing sin explotar adelante pero supo cerrar 30 - 23 la primera mitad.
El local mostró una mejor imagen. Fuller y Barnes (12 pts entre ambos en el periodo) fueron determinantes, comenzaron a soltarse y generar problemas a Racing. La academia siguió al frente, tuvo ráfagas y Barrales controló las acciones para quedar +11. El local continuó con su levantada, Fuller a buen ritmo y Barnes hizo el resto para llegar abajo apenas 46 - 41.
El final fue todo de Pergamino. El anfitrión con mayor intensidad, Levato acompañó con un triple y un parcial letal de 8-0 sumado a una técnica a Racing. Mariani (6) comenzó a cosechar en ofensiva, Racing acumuló pérdidas y errores dejando al local arriba 60 - 53. Pergamino aguantó con la experiencia de Mariani y Palacios (7) la embestida rival y lo aseguró con 4-5t1.
BOMBAZO DE ZÁRATE
La primera vez nunca se olvida, sigue latente en el fuego interno por siempre. Pocas cuestiones se comparan con el sabor de esa emoción iniciática y Zárate lo disfrutó con mayores condimentos por el desenlace. El elenco bonaerense abrochó su primera victoria en Liga Argentina y de un modo brillante, por la épica de un cotejo muy chivo, de fricciones, de errores, pero de mucha adrenalina y en la casa de Lanús.
La tripulación de Manuel Anglese transpiró el duelo, que dominó mayoritariamente en el tanteador, pero que en los instantes finales se le hizo cuesta arriba, porque el Granate encontró aire para pasar al frente en tres ocasiones, la última con 30 segundos con un doble de Franchino. Parecía que después de tanto remar, la embarcación se le iba a hundir. No obstante, Agustín Brocal se la jugó, penetró, se topó con una contención fortísima de Chaine, giró y soltó una bola que acarició la red, con 12 segundos en el reloj para el 58-57. Mazazo.
El dueño de casa ya no pudo volver a reaccionar, volver a concretar una remontada y la alegría cayó en manos de Zárate. Así, Lanús sumó su segunda caída en el fin de semana, tras el traspié en Chivilcoy del viernes. Mientras que los de Anglese abrazaron la victoria para cortar con las dos derrotas a cuestas.
El duelo se caracterizó por un goleo exiguo, de cifras tan magras que podrían invitar a investigar en los registros, al punto que al último cuarto ingresaron 44-41 para la vista. Sí, 44-41, con un 30,4% de cancha para el Granate y 37,5% de los zarateños. Aunque en cuanto a las performances, los visitantes exhibieron siempre una mayor concentración, una decisión granítica por defender como leones, con un inteligente aislamiento a Chaine, que solo se filtró en el tercer cuarto cuando juntó marcas y descargó para las bombas de sus compañeros. Luego, lo de Zárate fue de manual en lo defensivo.
El equipo bonaerense condensó su labor en los cinco titulares, que jugaron todos arriba de 26 minutos con picos de 34 en Andújar y 32 en Brocal. La actitud se erigió en una constante. Tras comenzar 8-3 abajo, el visitante revirtió y manejó el tanteador, con brechas entre 5 y 8 puntos y unos tramos de 10.
Lanús no rodó en su mejor versión, le costó romper el cerco electrificado defensivo del oponente y regresó en el último capítulo con tres bombas y el peso de sus mayores. Pero los errores estuvieron a la orden del día, un comportamiento que los acompañó en toda la noche.
Lucas Andujar con 13 puntos, 5 asistencias, 4 rebotes, 3 recuperos y una enjundia defensiva se destacó en el Antonio Rotili. Ni hablar de Brocal con 15 unidades (3/8 en triples), 4 rebotes y 2 asistencias.
Lanús 57: Bruna 2, Kelly 14, Di Muccio 3, Franchino 9, Chaine 9 (fi), Gago 2, Pablo 12, Chiabotto 6, Sacchi 0, Roveres 0. DT: Leo Costa.