Anegón y Franco los baluartes del domingo

OTRO ÉXITO PARA EL CELESTE

Oberá Tenis Club (19-5) mantiene su marcha. El conjunto misionero sumó un nuevo triunfo, el noveno consecutivo en cancha, que lo afirma entre los cuatro equipos de punta. Su víctima fue La Unión de Formosa, al que derrotó por 68-54.

Los dirigidos por Lucas Gornatti debieron trabajar hasta el final para lograr el quiebre, pues el rival fue duro y siempre estuvo cerca en el marcador. El inicio fue muy parejo, el primer parcial fue 17-17, resultado que se repitió para los segundos diez minutos de juego. Al descanso largo se fueron igualados en 34.

Después del entretiempo, el Celeste fue encontrando algunos espacios, principalmente bajo el aro rival donde pudo hacer diferencias gracias a la altura y capacidad de sus jugadores. Ese tercer parcial fue en favor del local 16-13 para dejar el tablero 50-47.

En el último cuarto se vio lo mejor del dueño de casa. La tarea colectiva fue fundamental, comenzando desde la defensa que se cerró y solamente permitió que le anotaran 7 puntos. A partir de allí, el ataque pudo trabajar moviendo el balón y desorientando al rival que no podía contener el embestida.

El parcial fue claramente para OTC que lo ganó 18-7 y se quedó con una nueva victoria, la novena consecutiva, que lo mantiene entre los cuatro primeros. Santiago Konaszuk fue el más destacado con 16 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias.

PEÑA CON EL CIERRE

Peñarol (11-13) le ganó a San Lorenzo (6-17) por 87-84 un partido que tuvo condimentos varios. Se definió a falta de un segundo, con un triple de Tomás Framiñán para desatar la alegría marplatense en Boedo. El conjunto de Tomás Sirochinsky se lleva a La Feliz dos triunfos de las tres presentaciones de la gira por la ciudad de Buenos Aires. Para los Azulgranas, el descenso por el tobogán todavía no tiene fin. Fue la novena caída en fila en cancha.

San Lorenzo tuvo un primer cuarto a todo gol, donde hasta llegó a sacar renta máxima de 10 (24-14). Pero Peñarol cerró mejor para arrimar al cabo del primer cuarto (24-20). Lucas Gorosterrazú sostuvo la bandera en el parcial abridor con 12 puntos. La tendencia se mantuvo en el segundo, Peñarol encontró más vías de gol (Franco, Bednarek, Anegón), y pasó al frente. Hasta llegó a tener luz de 10 (50-40) al final de la primera mitad.

Los de Mar del Plata mantuvieron lo bueno que hacían en ofensiva durante buena parte del tercero. Estiraron su ventaja máxima a 12 (68-56 a falta de 2’39’’). Pero apareció el Ciclón. San Lorenzo cerró mejor el cuarto (con parcial de 11-1) para ponerse a sólo 2 (69-67) entrando al cuarto final. La paridad se mantuvo durante todo el parcial. El local hasta llegó a pasar al frente, pero brevemente. Ninguno tomó más de dos posesiones de distancia.

Al último minuto entraron igualados en 84. Tomás Cattáneo atacó por fondo, la defensa se cerró en el eje y el perimetral halló bien plantado en el espacio del lado opuesto a Tomás Framiñán. A pesar de no tener una noche de las más agraciadas con el aro (llevaba 1/8 triples hasta el momento), el tirador no dudó en tomar el lanzamiento perimetral que dio la diferencia final de 87-84 a los marplatenses para festejar en Boedo.

Lucas Anegón hizo de todo un poco para Peñarol. Metió 24 puntos (4/8 triples), bajó 6 rebotes, repartió 5 asistencias y recuperó 3 pelotas.