Contra las cuerdas

Quimsa sufrió una muy dura derrota en Brasil iniciando la ventana final de la Champions League. Cayó claramente ante Sao Paulo 95 - 73 para quedar con marca de 1-4 en el Grupo. Jugará la última jornada ante Nacional con la obligación de vencerlo por cualquier score para quedarse con la ventaja entre sí.

El local esgrimió un potencial ofensivo impactante. Caboclo aportó 23 pts y 10 rebotes, sumado a Sousa con 23 pts, Stallworth aportó 20 ps y Curnell (15 pts, 7 rebotes, 8 asistencias) a punto del triple doble. Quimsa extrañó muchas de sus habituales variantes adelante, donde solo Sorjo (15) y Thomas (14) dieron la cara.

El local tuvo las riendas del juego. Ganó físicamente, Caboclo y Curnell fueron determinantes para dispararse 14 - 7. Quimsa mejoró en ambos costados, Sorjo fue clave para quedar a la expectativa pero Sao Paulo cerró de gran manera el periodo. Caboclo con un bombazo, sumado al juego rápido y de transición para un claro 27 - 18.

Sao Paulo llegó a distanciarse +12 aunque Quimsa tuvo su mejor pasaje. Sorjo (10) fue importante junto a Baralle para distribuir y achicar a una posesión (32 - 29) e intentar bajar el ritmo a su rival. Más allá de eso, Sao Paulo tuvo otro bien final yendo fuerte al canasto, aprovechando espacios y con variantes para el claro 46 - 35.

No cambió demasiado la situación. Quimsa sin variantes claras, Thomas, un rato del revulsivo Toretta más Sorjo pero el local con el dominio del juego. De hecho, Sao Paulo aprovechó las dudas de su rival para anotar en velocidad y tener la ventaja de +13 (59 - 46) tras una fantástico alley oop sin oposición. Quimsa intercambió gol por gol, nunca pudo hacerse fuerte atrás y encima sufrió otro final.

Marquinhos Souza con un triplazo a la carrera tras un recupero y llovido sobre mojado: 70 - 58. Final sin sorpresas. Stallworth y Caboclo con energía suficiente para anotar y ganar cerca y lejos del canasto, situarse +16 y de a poco terminar con la noche de Quimsa. Un par de volcadas lapidarias de Curnell tras rebote ofensivo y Caboclo dejando por el piso las aspiraciones del santiagueño.

José Fiebig

@Josefiebig