Guerreros de oro

Los Golden State Warriors vencieron a los Boston Celtics en el sexto punto de las finales y se consagraron campeones de la NBA. El equipo de la Bahía, comandado principalmente por Stephen Curry, fue más que Boston y consiguió su sexto anillo en la historia y cuarto desde 2014. El FMVP (Mejor jugador de las finales) fue para Steph Curry, que se lució con promedios de 31.2 puntos, 5 rebotes y 6 asistencias en 37 minutos.

En este último juego en particular Boston, que jugó como local, comenzó el primer cuarto un poco por encima pero Golden State despertó con una ráfaga de 11-0 que los puso en partido. A partir de ahí siguieron sacando ventajas e incluso alcanzaron una diferencia de 22 puntos como la máxima del encuentro.

Fue una serie dura pese a no llegar a un juego 7. Ambos equipos merecían todo pero la experiencia y la frescura terminaron haciendo que la balanza se decante para el lado de los Warriors. Golden State tuvo una eliminatoria mucho menos sufrida, desde las bajas en el equipo hasta la intensidad de los juegos, en comparación a Boston.

Los nuevos campeones se enfrentaron a unos muy inferiores y diezmados Nuggets en primera ronda, a quienes limpiaron sin sobresaltos 4-1. En la segunda instancia se vieron las caras ante los Memphis Grizzlies, una serie que se puso picante pero que los Warriors siempre tuvieron dominada y se terminaron llevando 4-2.

Por último, las finales de conferencia ante la sorpresa. Unos Dallas Mavericks que venían con el envión de eliminar a uno de los favoritos contra todo pronóstico no pudieron hacerle mucho frente a Curry y compañía, nuevamente fue 4-2 para GSW.

Por el lado de Boston luego de la barrida, que quedará para la historia, ante unos decepcionantes Nets. Tuvieron una serie durísima ante los Bucks de Giannis, que se fue hasta el juego 7 y no estuvo definida hasta el final.

Luego pasó algo similar ante Miami, llegaron al último partido empatados 3-3 y la serie era una verdadera incógnita. Dieron un nivel espectacular que les permitió llegar hasta la instancia que llegaron, pero el cansancio acumulado fue un factor clave para que los Warriors terminen siendo superiores a la larga.

Obviamente sin quitarle mérito a Golden State, que en todo momento mostró ser un equipo mucho más preparado para estas instancias y que juegan a algo más allá del partido dentro de la cancha. Los Warriors formaron un equipo hecho para estas instancias, que pese a que fue de menor a mayor siempre dominó hasta no jugando del todo bien y llegó a las finales decidido a ir por todo. Terminaron ganando tanto en constancia, en físico, en actitud y en táctica, fueron claros vencedores ante unos Boston Celtics que se encontraban en sus primeras finales.

En este último partido Curry lideró en ataque con 34 puntos y 6/10 en triples, acompañado de Wiggins, que continuó con la excelente actuación que tuvo en todos los playoffs y aportó 18 puntos. Draymond Green también fue clave con 12 puntos y 12 rebotes, sumando que apenas acumuló una falta, vale aclarar que fue expulsado por exceder el límite de infracciones en 3 de los 6 juegos de la serie. Por el lado de Boston Tatum estuvo borrado con apenas 13 puntos y Jaylen Brown hizo todo lo que pudo anotando 34 unidades, pero no alcanzó.

Stephen Curry se consagró por primera vez como FMVP, gran cuenta pendiente que tenía Steph en las finales, ya que pese a tener tres anillos nunca había ganado el premio al mejor jugador de esta instancia.

Joaquín Cirigliano
Pick&Roll