Se cumplieron casi dos meses de la consagración de Quimsa en la quinta edición de la Basketball Champions League Américas (BCLA). Resulta necesario detenerse a evaluar las mejoras que podría, y debería, tener el torneo más importante del continente con vistas al futuro inmediato.
Autor:Esteban Fernández (especial para www.pickandroll.com.ar)
LA CHAMPIONS PIDE URGENTE EXPANSIÓN
Se cumplió un mes y medio de la consagración de Quimsa en la quinta edición de la Basketball Champions League Américas (BCLA). Resulta necesario detenerse a evaluar las mejoras que podría, y debería, tener el torneo más importante del continente con vistas al futuro inmediato.
El hecho que el certamen mantenga un status de excelencia y exclusividad, reservada para unos pocos que hicieron grandes méritos para jugarla, no debe hacernos creer que siempre están participando los mejores posibles. Vamos a contextualizar esto por partes, considerando que siempre hay cosas por corregir, y desde este lugar de observador y consumidor señalaré posibles mejoras a los organizadores.
Formato actual
Analicemos el formato actual de la competición. La disputan 12 equipos divididos en 4 grupos de tres participantes. Bajo esta modalidad, en cada uno de esos grupos hay tres ventanas donde el público de cada lugar puede ver en forma presencial solo tres partidos, uno por día de competencia. Y si analizamos la segunda fase del torneo clasifican 8 equipos de 12 a los cuartos de final (66% de los participantes iniciales), lo cual solo elimina a un equipo por grupo.
Ahora analicemos los participantes. No se discute aquí el hecho que quienes disputan la BCLA cada temporada son los mejores en sus países, o al menos así debiera ser. Pero hay equipos que conforme pasan los años no pueden consolidarse en el plano internacional, no dan la talla para disputar la competencia. Esto no es subjetivo, se refleja puramente en los datos y registros. UdeC es un ejemplo de ello. Los chilenos disputaron cuatro temporadas de las cinco que se han jugado, y en sus 24 partidos solo han ganado en 3 oportunidades (sin mencionar que ostenta la segunda, quinta y sexta peor derrota en la BCLA).
Otro ejemplo de esto es Obras, quien en todas sus participaciones se clasificó a disputar la BCLA por méritos de otras categorías del club más que por sus discretas campañas en la Liga Nacional de Básquet. Este método de clasificación es algo a rever por parte de la organización. El equipo argentino dista mucho de ser uno de los equipos protagonistas del básquet en Argentina, y de hecho no lo fue en ninguna de sus participaciones.
Sus números no son muy diferentes a los de UdeC. También participó en cuatro temporadas, y también jugó 24 partidos, donde solo ganó en 7 oportunidades. Las dos veces que pasó de ronda no fue por ganar su grupo, y tiene el récord negativo en BCLA de la peor racha de un equipo hasta conseguir su primera victoria (8 caídas en fila entre ediciones 2021 y 2021/22).
El ideal
Anteriormente se señaló que los grupos actuales tienen una cantidad impar de participantes, dando por resultado que en cada zona haya solo un partido por día de competición (un equipo siempre queda libre). Si se incluyera 4 equipos más se podrían formar 4 grupos de 4 participantes. De esta manera habría cuatro ventanas por zonas, y el público de cada lugar podría disfrutar de dos juegos por día, ningún equipo quedaría libre, y en cada ventana pasaría de haber 3 juegos a 6 en total (el doble).
Deportivamente este cambio también significaría que cada equipo dispute 12 partidos en fase de grupos, contra los 6 actuales. Esto, a su vez, permitiría a los equipos un mayor margen para recuperarse de malos resultados, y no quedar eliminados rápidamente de la competición.
Y con respecto a la segunda fase del torneo, con esta modificación se eliminarían dos equipos frente a uno solo por grupo, lo que aumentaría de cierta manera la expectativa en el público y demandaría mayor eficacia en los equipos (en números, pasaría de ronda el 50% de los participantes contra el 66% del presente). El calendario, por su parte, solo se extendería un mes con respecto al formato que se viene disputando.
Centroamérica pide cancha
Si algo tienen en común las ediciones disputadas de BCLA es que en todas ellas hubo muy poca participación de equipos de Centroamérica. El mejor y casi único exponente que realiza campañas destacadas es Real Estelí de Nicaragua. Exceptuando la edición actual donde Halcones de Xalapa estuvo en el Final Four, los equipos del hemisferio norte no suelen encontrar buena regularidad en la BCLA. El torneo año a año es ganado y dominado por equipos sudamericanos.
Es necesario y sería muy sano que se incorporen más equipos centroamericanos al máximo torneo continental. No se descubre nada nuevo marcando la enorme tradición basquetbolística de países como Puerto Rico, República Dominicana, Bahamas o Panamá. Resulta por lo tanto inadmisible que un certamen que se jacte de ser la competencia por excelencia de básquet en este continente, y de hecho lo es, no haya tenido hasta el momento ningún representante de Bahamas o República Dominicana, mientras que los otros dos países mencionados solo tuvieron representante en una temporada.
Además de las cuatro naciones mencionadas debería agregarse a esta lista Venezuela, ya que recién en esta quinta edición tuvo a su primer representante en BCLA con Gladiadores de Anzoátegui, y al igual que los mencionados también es una potencia en este deporte en el continente. No estamos hablando que FIBA explore nuevos mercados o realice una apuesta fuerte de riesgo incluyendo equipos ignotos, todo lo contrario, sería un éxito asegurado la integración de equipos de todos los países potencias dentro del básquet continental.
La presencia de equipos de estos lugares, dígase campeones y/o subcampeones de esas ligas, enaltecería sin objeciones el nivel y la competitividad de la BCLA. El torneo debería reservarse para los mejores (equipos) de los mejores (países).
A más partidos mejores derechos
No es necesario en este caso ser expertos en marketing deportivo para saber que en el plano económico atraería mucho más al público y a las marcas el hecho que la competencia dispute más partidos de los que se tiene hasta ahora. Retomando el capítulo de la cantidad de juegos, agregando cuatro equipos a la competencia la fase de grupos pasaría de tener de 36 a 96 juegos en total.
Esto seguramente permita negociar los sponsors y derechos televisivos por mejores valores para las arcas de FIBA Américas. La gente de cada lugar, como ya se mencionó, podrá disfrutar de dos juegos por día en vez de solo uno. Para los equipos significará un reto mayor estar disputando la competencia ante más rivales, y tendrá otro valor para el campeón ser el mejor de 16 participantes que ante otros 11 contrincantes como en la actualidad.
Conclusión
En líneas generales, y para cerrar esta editorial, el torneo tiene mucho potencial para seguir creciendo. Los cambios señalados apuntan a una apertura mayor en cuanto a participantes y a mayor cantidad de partidos a la competencia, lo que en definitiva es mejor para el torneo, para el público y para el espectáculo en general. Que el horizonte ilumine lugares donde la BCLA hoy solo llega por los medios y no presencialmente, la historia del gran básquet continental así lo demanda.