Tony Parker, base de San Antonio Spurs y compañero de Manu Ginóbili, visitó San Lorenzo de Almagro dentro de una gira que está realizando por la Ciudad de Buenos Aires. Una visita de relieve para el Azulgrana y para el básquet argentino.
En el marco de una visita que está realizando por la Ciudad de Buenos Aires, la estrella de la NBA Tony Parker se dio una vuelta relámpago por Boedo, más precisamente por el Polideportivo Roberto Pando.
El compañero de Emmanuel Ginóbili en los San Antonio Spurs llegó a las modernas instalaciones de San Lorenzo de Almagro y fue recibido por el vicepresidente segundo del club, Roberto Alvarez, el intendente Alejandro Macció y los recientes campeones de la Liga Nacional, Jerome Meyinsse y Selem Safar.
Apenas ingresó al Polideportivo, Parker pasó por las oficinas y felicitó a los jugadores de San Lorenzo por el reciente bicampeonato y recibió dos casacas de obsequio: la de fútbol y básquet. Además, posó con las copas de los tres títulos que conquistó el Ciclón en su regreso a la Liga Nacional y se animó a preguntar la distancia que había entre Boedo y Bahía Blanca, la ciudad natal de su compañero Manu Ginóbili.
Luego, ante unos 100 chicos, de los cuales 10 eran del básquet formativo del Ciclón y participaron activamente de una mini clínica con el base francés, San Lorenzo de Almagro vivió otra jornada histórica en su casa, recibiendo a uno de los jugadores más relevantes que ha dado la NBA en la última década, ganador de cuatro anillos en la liga más importante del mundo.
Lo destacado de su participación en el rectángulo de juego fue cuando desafío al resto a lanzar un triple con una mano, de espaldas y desde la mitad de la cancha. Parker, a pesar de que se está recuperando de una lesión, no desentonó: la clavó limpita en el aro que da a la cabecera local. Aplausos de todos los presentes y despedida de Boedo con un "Saludo San Lorenzo".
