Yo voto por China

Falta un partido que no se jugó pero que de apoco todos van pasando por alto. Argentina ya es segunda del grupo y no hay otra posición posible. Ni caer ni subir. Rusia será rival mañana y esta eliminada de la competencia.

¿Con que ánimo jugará el actual campeón de Europa? ¿Querrá limpiar un poco su imagen? ¿Le importará?.

¿Y argentina que hará?. Según Luis Scola “Contra Rusia no se puede aflojar, hay que ganar”, Mientras que otro líder, Emanuel Ginóbili, sostiene: “Yo quiero el triunfo, probar jugadas y que los suplentes sumen minutos, pero saldremos a ganar, no hay otra”.

Las declaraciones están muy bien, con el respeto que se merece cada actuación argentina, de nada sirve ganar o perder. Contra Irán, Sergio Hernández utilizó muy poco al banco de suplentes. El rival era muy inferior al rival de mañana. Ganar era importante pero la magnitud del rival también era diferente.

Salvo que haya una gran sorpresa, Argentina saldrá a ganar sumando similares minutos los mismos seis jugadores. Acaso sea Oberto el que menos juegue tras el golpe sufrido ante Irán que le dejó un tratamiento de analgésicos.

Pablo Prigioni (30.3), Emanuel Ginóbili (29.5), Andrés Nocioni (29.5), Luis Scola (28,3), Carlos Delfino (25,3), Fabricio Oberto 24,3). Todos están entre los 35 jugadores que más juegan, sabiendo que ya se jugó contra Irán y que Oberto solo jugó 13 minutos por lesión. Si el partido con Rusia definiera algo los promedios subirían.

El resto del plantel viene muy lejos en minutos. Juan Gutiérrez (7,8) Paolo Quinteros (7,5) y Román González (6).

La historia previa ahora se divide en dos: seguir creciendo como equipo y para eso se necesitan varios minutos de los titulares o poner los suplentes para que ganen confianza y descansen los titulares en vista al partido de los cuartos de final.

Para el primer objetivo (seguir creciendo como equipo) se debe contar necesariamente con una complicidad del rival. Que Rusia ofrezca la misma resistencia que ofreció por ejemplo Irán, que fue muy digno como jugó contra nosotros. Si Rusia sale de paseo, será innecesario ponerlo a Ginóbili y sus muchachos. La oposición de Rusia será revelada solo durante el partido.

Ahora si el plan es hacer jugar a los suplentes mechando algunos minutos a los titulares, entonces lo que haga Rusia será indiferente.

Detrás de este partido que cierra la fase regular habrá 48 horas y a la cancha por los cuartos de final. La lógica indica que será ante Grecia, que de ganarle a China mañana será nuestro rival. Se repite la historia de Atenas 2004, al menos en el cruce de cuartos de final y posible semifinal (USA).

Consultado post partido por el posible rival Manu Ginóbili aclaró: “Prefiero a China, con todo respeto. A ninguno de los dos los vi jugar, pero de Grecia conozco a sus jugadores, sé que es un equipo duro, áspero, bien trabajado, que tiene oficio y mucho recambio. China me parece muy disciplinada y tiene a un gran jugador como Yao Ming, pero sin tanta experiencia como los griegos. Además, no creo que el hecho de ser locales nos perjudique. Nosotros jugamos los cuartos de final en Atenas con Grecia y esa localía es muy difícil. Si llegáramos a perder con China o será precisamente por la localía”.

Los griegos arrancaron con una derrota ante España (66-81) jugando muy mal ante un candidato, luego vencieron bien a Alemania (87-64) en la mejor producción que han tenido en el torneo, cayeron ante los Estados Unidos sin atenuantes (92-69) y derrotaron a Angola 102-61 sin problemas.

Alemania fue la gran decepción del grupo comparable a Rusia en el nuestro. Sin respuestas anímicas en cada juego, indisciplina táctica dentro de la cancha y según los colegas alemanes, hubo indisciplina fuera de ella también. Vinieron de paseo a Beijing. Ese fue el rival más difícil al que le ganó Grecia hasta ahora.

Esto no dice que Grecia sea un equipito. Al igual que nuestra selección los griegos sacan lo mejor de si en los partidos a todo o nada y en situaciones límites. Tienen experiencia, fuerza y talento. Por eso el pensamiento de Manu es lógico. Si es posible evitarlo, no estaría mal. Pero no depende ya de nosotros.

China es un equipo que practica un básquetbol de cadetes. Talentosos e inocentes. Tienen además el peso y la responsabilidad de jugar ante su público algo que a veces le juega a favor y otras en contra. Yao Ming es de oro, el resto está muy por debajo de su nivel. Cuando nos toque el cruce haremos el análisis correspondiente pero China es mucho más ideal que Grecia.

Primero veamos que quiere hacer argentina contra Rusia. Luego vendrán los cuartos de final. Pero es imposible no ir viviendo el choque decisivo del miércoles. La ansias de medalla están puestas allí.

Foto: Xinhua.

Desde Beijing - Pablo Tosal
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